Ganar o perder, que mas da. Si nada tiene valor ni sentido para mi, si no tengo nada ni nadie que me atraiga lo mínimamente suficiente como para que sienta emoción por ello, qué más me da ganar o perder. Simplemente el hecho de la victoria, de saberme mejor que los demas me da cierto placer. Placer efímero y van al que no tiene nada detrás ni tampoco más adelante en el tiempo o el espacio.
Y eso me lleva de nuevo al vacío. No hay nada en mi. No siento nada, no deseo nada, ya ni siquiera sufro por nada. Todo pasa por el filtro de la razón, que todo lo analiza y lo comprende quitando toda carga emocional a cualquier cosa.
¿He sido siempre así? Creo que no, pero también puede ser que no fuese tan consciente de lo que soy como lo soy ahora. Nunca he sido de amigos, más allá de lo que socialmente me era necesario. No arrastró ni amistades, ni pasado conmigo. Estoy y luego ya no. Nunca vuelvo atrás, no siento nostalgia, ni casi remordimientos por lo que haya hecho.
Nada ni nadie me importa, ni yo mismo me importo. Así que qué más da lo que suceda a mi alrededor. Puede que mi preocupación por los demás sea tan falsa como mi propio yo.
Lo que está muerto no puede morir. 